domingo, 7 de julio de 2013

TANABATA




El” tanabata”,  significa siete días. Es una fiesta originaria de China y adoptada por los japoneses en el periodo Nara (entre los siglos VII a IX). Se celebra el día 7 de julio cuando dos estrellas que están  separadas el resto  del año por la vía láctea se reúnen; es el día del reencuentro de “Vega y Altair”. Ambas  estrellas representan a un par de enamorados; Vega es Orohime (dama de los tejidos), una hermosa mujer hija de Tenkou, dios de los cielos; ella trabajaba todo el día con un telar llamado Tanabata a la orilla del río Amanogawa, representado por la vía láctea. Mientras; Altair, representa a Kengyu, un pastor de bueyes que estaba del otro lado del Amanogawa.

Son muchas las variantes que tiene la historia de esta pareja de enamorados.  
La que cuento a continuación es la más popular:                                       
Tenkou complacido con el trabajo que realizaba el pastor Kengyu decidió presentarle a su hija, a partir del primer encuentro surgió un apasionado enamoramiento de Orohime y Kengyu. Desde ese día, la princesa de los tejidos, abandonaba todos los días su labor para ver a su amado.
Esto ocasionó que poco a poco fueran olvidándose de sus obligaciones hasta el punto de dejarlas a un lado, todo para poder seguir juntos. Ese amor llegó a oídos de  Tenkou, que enfurecido, los condenó a vivir a cada uno en una orilla diferente del Amanogawa para que de esta manera solo tuvieran ocasión de verse solo un día al año: el séptimo día del séptimo mes.

Así que ese día de  cada año llega el barquero mágico de la luna que llevará a Orohime (Vega) al otro lado del Amanogawa (Vía Láctea) para encontrarse con su amado Kengyu (Altair), y ello sucederá solo si Tenkou está complacido con el trabajo de Orohime y no hace llover, en caso contrario la lluvia hundiría al barquero y no se podrían ver ese año.
Cada año los japoneses celebran la reunión de Orohime y Kengyo. Semanas antes del encuentro de las dos estrellas, se colocan árboles de bambú en las escuelas, oficinas y sitios públicos; en ellos las personas tienen la oportunidad de colocar papeles llamados” tanzaku” con un deseo escrito, usualmente son deseos de amor y es una práctica muy común en  Japón; todo ello con la esperanza de que Orohime les conceda su deseo. Esa noche las personas rezan para que no  llueva y así los enamorados puedan reunirse.  

El bambú y las decoraciones a menudo se colocan a flote sobre un río o se queman tras el festival, sobre la medianoche o al día siguiente.

Antiguamente era una festividad muy femenina, las mujeres colgaban sus deseos de conseguir novio o a su amor platónico.

Cuando todas las celebraciones terminan y siguiendo la tradición japonesa de que las cosas que implican algo muy íntimo de la persona no se pueden tirar a la basura, las ramas de bambú se dejan en los ríos, para que la corriente se lleve los deseos hasta el río celestial de la Vía Láctea.

(especialmente dedicado a mi amiga Aurora que hoy cumple años)

ANA, 7 DE JULIO DE 2013


 

1 comentario:

  1. ...traigo
    ecos
    de
    la
    tarde
    callada
    en
    la
    mano
    y
    una
    vela
    de
    mi
    corazón
    para
    invitarte
    y
    darte
    este
    alma
    que
    viene
    para
    compartir
    contigo
    tu
    bello
    blog
    con
    un
    ramillete
    de
    oro
    y
    claveles
    dentro...


    desde mis
    HORAS ROTAS
    Y AULA DE PAZ


    COMPARTIENDO ILUSION
    ANA ROSA



    CON saludos de la luna al
    reflejarse en el mar de la
    poesía...




    ESPERO SEAN DE VUESTRO AGRADO EL POST POETIZADO DE EXCALIBUR, DJANGO, MASTER AND COMMANDER, LEYENDAS DE PASIÓN, BAILANDO CON LOBOS, THE ARTIST, TITANIC…

    José
    Ramón...


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